Fue en 2008, sumergidos en plena crisis del ladrillo, cuando un joven Gerard Oms decidió romper con su entorno. Hizo lo que otros muchos hicieron antes, emigrar y empezar de cero, pero en su caso, el trabajo no era su único motivo. Tenía 25 años y seguía sin aceptar su identidad. Ahora en 2025, una excelente «Muy Lejos» le sirve para reconciliarse consigo mismo.
Y lo hace volcando parte de aquellas vivencias en el extranjero, sobre su primera película. Una carta de presentación mitad ficción, mitad autobiográfica que ya es una de las mejores películas españolas del año. Cine en mayúsculas que huele a Goya y con un Mario Casas en estado de gracia.
Su experiencia personal como emigrante, esa es la clave de «Muy Lejos»
Según él mismo cuenta, aquel viaje le ayudó a cambiar su modo de entender el mundo, y de aquel viaje hoy disfrutamos todos. Con él como punto de partida y a través de los sentimientos y emociones de su protagonista, Gerard Oms nos invita a mirarnos al espejo, y lo que vemos, nuestro reflejo, pocas veces nos suele gustar. Miedo a ser rechazado, dudas, sentido de pertenencia, identidad. Ese concepto abstracto de patria. Racismo, xenofobia. Un camino oscuro hacia el autodescubrimiento que empieza en los Países Bajos.
El viaje de Sergio
En el aeropuerto ya sabes que vas a disfrutar del viaje. Lo que plantea y como lo plantea me interesa. El director catalán parece tener ese ‘algo’ diferente, un don para contar historias y me dejo llevar. Cámara en mano, simulando realismo e inmediatez, nos coloca entre los gritos de la multitud. Estamos en Utrecht, hay partido de fútbol y antes de entrar vemos a Sergio, nuestro protagonista y alter ego de Gerard Oms. Un hombre normal de 35 años y aficionado del Español al que da vida un brillante Mario Casas. Sí, brillante y creíble en todo momento. Tan buena es la película como su interpretación, la mejor de su carrera.

Su rostro pintado con los colores de su equipo ya deja entrever una pesada carga. Frente al estadio, entre cánticos y banderas blanquiazules, rodeado por tantos y tan solo. Su cárcel, donde se siente a salvo y cumple condena. El ‘yo soy yo y mis circunstancias’ que le hunde el pecho cada noche hasta asfixiarlo. Y del humo de las bengalas, las notas estridentes de un chelo sin afinar nos llevan a la barra de un bar. La fiesta continúa tras el partido y con ella la exhibición del macho alfa, el ritual primitivo de apareamiento que se desata ante la presencia de una joven camarera. La victoria del grupo, el suyo, se celebra entre alcohol y testosterona.
Cuando a la mañana siguiente todos regresan al aeropuerto, «Muy lejos» nos marca el nuevo comienzo. Es la oportunidad de Sergio para romper con todo. Su padre, su hermano, amigos, el peso, la carga y su condena, suben al avión, pero él se queda. Y en ese momento de despedidas por sorpresa, hay tanto de alivio como de inquietud. El ruido de la noche anterior solo es silencio y las dudas empiezan a ganar protagonismo. Todo se siente más oscuro. Solo y sin privilegios, Sergio no es más que otro emigrante pobre en Utrecht.
«Muy Lejos» de artificios y chantajes, más cerca de lo real
Siempre llueve en esa ciudad y cuando no lo hace, el fino velo de niebla parece una constante. El personaje interpretado por Mario Casas, cabizbajo camina por la mediana de una calle principal. Frente a él, se parte en dos el asfalto. Un puente elevadizo se abre poco a poco, alzándose ante nosotros como un inmenso muro que le bloquea el paso. Sergio nos da la espalda pero no avanza.
Como una metáfora de sus miedos, prejuicios y contradicciones, el director parece retarlo a desaprender lo aprendido y continuar. Su figura inmóvil observa el muro de cemento. La evolución no se presenta fácil.
Oms pinta a su alter ego con valentía y sinceridad, lleno de luces y sombras que le dignifican y lo hacen más creíble. Sergio no es referente de nada, parece decirnos. No es un héroe, tampoco un villano, su forma de ser viene marcada por su entorno. Un personaje lleno de prejuicios y contradicciones, comportamientos reprochables y obstinado en refugiarse en sus fobias, y sin embargo nos reflejamos en él. Es su manera tan imperfecta de ser la que atrae, una escala de grises que lo vuelve real.
Ese chelo que con el tiempo tiene rostro y suena mejor, las pachangas en las canchas del barrio, los amigos detenidos y deportados, la xenofobia, los encuentros fortuitos, la decepción, unos versos recitados en catalán. Sus historias, las crudas y las de amor, las que se cruzan y las que se quedan con nosotros, son igual de importantes. Las que no tienen nombre y apenas se dejan ver. Todas forman parte de nuestro retrato final.
En este caso, un viaje, el de Sergio o Gerard Oms. Uno real o de ficción. Un viaje de autodescubrimiento a través de la mirada de un emigrante en el extranjero. Y lo dicho, una de las mejores películas españolas del año.
Dónde ver «Muy Lejos»
Presentada en el Festival de Málaga 2025 donde ganó el Premio de la Crítica y el de Mejor Actor (Mario Casas), «Muy Lejos» se estrenó en cines el 16 de marzo. Ahora, desde el 1 de agosto se puede disfrutar en Filmin y Movistar +.
Ficha Técnica
Título original: Molt lluny
Año: 2025 / Duración: 100 min. / País: España
Director: Gerard Oms / Guion: Gerard Oms
Reparto: Mario Casas, David Verdaguer, El Ouahdani, Raúl Prieto, Nausicaa Bonnín
Género: Drama
Calificación: 7/10









