Al fin le doy una oportunidad al cine de Éric Rohmer, un director francés que aportó su visión característica de las relaciones sentimentales al movimiento de la Nouvelle Vague. Y después de ver uno de sus trabajos más aclamados, comprendo su entendimiento de las complejidades sentimentales más primitivas.
Rutina y tentación
El amor después del mediodía (1972) es un ejercicio propio de un filósofo, de un orfebre del pensamiento y cuestionamiento de lo que le rodea, ya sea corpóreo o etéreo. Esta obra encapsula la delicadeza de las relaciones, de cómo el ser humano es, en muchas ocasiones, un individuo delineado por la debilidad y la tentación.
Rohmer presenta a un hombre casado, Paul, que se ve atraído y tentado por una joven, Claire, con quien invertirá el tiempo suficiente como para replantearse sus propios principios con respecto al amor y la lealtad. Leyendo esta sucinta premisa, uno podría pensar que la cinta emana dramatismo, pero una de sus virtudes es la completa ausencia de sensacionalismo; la acción se da con la cotidianidad propia de los días, con la mera interacción entre los personajes y sus reflexiones, siendo suficiente para transmitir un mensaje.
La ética de Rohmer
El francés dilata los diálogos con líneas cargadas de una sensibilidad, universalidad y naturalidad abrumadoras. Logras entender a cada uno de los personajes a pesar de sus evidentes defectos. Y los entiendes sin que el guion los juzgue o los justifique. Rohmer se mantiene alejado de sentencias baladís; él prefiere exponer la complejidad de los dilemas y las motivaciones de cada personaje. Es quirúrgico a la hora de configurar el esqueleto de su obra.
Ahondando más en la periferia temática de la cinta, la moralidad juega un papel clave, ya que se presenta como un valor necesario, pero subjetivo. No responde a una unilateralidad impuesta, sino que Rohmer la entiende como algo íntimo, personalísimo.
Soledad latente
Por otro lado, existe un estudio de la soledad, de una soledad que no es evidente, es invisible, pero acecha latente en la vida de Paul, ya que este se siente distanciado emocionalmente de su mujer, circunstancia que le incita, por la propia inercia de su infelicidad, a explorar más allá de los límites morales establecidos por la sociedad. Pero resulta pragmático cómo esos diálogos entre Paul y Claire se entienden más como una terapia simbiótica que un mero proceso de atracción superficial.
Una meditación
Rohmer realiza un grandísimo trabajo sobre la naturaleza humana con diálogos exquisitos y con silencios atronadores. Es la antítesis de las películas románticas por una narrativa plagada de sutilezas y por un ritmo intrínsecamente introspectivo, pero aún así, sigue siendo bella en su ánimo de hacer reflexionar.
¿Dónde ver El amor después del mediodía?
No he sido capaz de encontrar su disponibilidad en plataformas de streaming.
Ficha Técnica
Título original: L’Amour l’après-midi (Chloe in the Afternoon)
Año: 1972
Duración: 93 min.
País: Francia
Director: Éric Rohmer
Guion: Éric Rohmer
Reparto: Bernard Verley, Zouzou, Françoise Verley, Daniel Ceccaldi, Malvina Penne, Babette Ferrier
Género: Drama Romántico, Amistad, Nouvelle Vague
Calificación: 8’75/10